En nuestra parroquia, ofrecemos la celebración de la Eucaristía de difuntos como un gesto de fe, amor y esperanza hacia aquellos que han partido.
A través de esta misa, nos unimos como comunidad para orar por el alma del ser querido, pedir consuelo para sus familiares y confiar en la misericordia de Dios. Es un momento para agradecer su vida, rendirle homenaje y encontrar paz en la promesa de la vida eterna.
Durante la celebración, se menciona especialmente a los difuntos del mes en curso. Es una oportunidad para acompañar en el duelo, renovar la esperanza y sentirnos unidos en la fe.